El hombre que devora al hombre: Sweeney Todd
El hombre que devora al hombre: Sweeney Todd
La presentación de Sweeney Todd el pasado 26 de abril, en el Teatro Queen Elizabeth fue todo suceso. La noche anterior fue el estreno, sin embargo, la función de matiné estuvo increíble.
Sweeney Todd: el barbero diabólico de la calle Fleet es un musical de Stephen Sondheim y Hugh Wheeler, que a su vez está basado en la obra teatral de Christopher Bond. Hasta la fecha no se ha podido decir con certeza si los hechos en los que se inspira realmente sucedieron, o si Benjamin Barker verdaderamente existió, no obstante, la obra podría fácilmente ser la representación de la sociedad de nuestros días, o de cualquier otra época. Con obvias referencias a la situación actual del mundo, Benjamin Barker impactó al público con su ironía y sarcasmo, con su anhelo por ver padecer a quienes le hicieron sufrir.
Sweeney Todd es un melodrama. Dentro del musical hay momentos de risa y burla, también de ansiedad, terror y muerte.
La escenografía impresionante; los vestuarios, sencillos pero contundentes. Con una enorme plataforma que se movía de adelante hacia atrás o en círculos pasando sobre la orquesta que se hallaba al centro del escenario, las acciones se realizaban en varios planos. Incluso el lugar que típicamente ocupa la orquesta, fue de hecho el sótano en el que los cuerpos sin vida eran cortados, molida la carne y luego horneada en pasteles.
Por motivos de salud, al barítono Greer Grimsley -quien desempeñó el papel de Sweeney Todd o Benjamin Barker- le fue imposible cantar, sin embargo su actuación fue impecable. La voz del personaje estuvo a cargo de George Masswohl, quien a pesar de no estar visible en el escenario, cantó con la intensidad y la emoción de quien actuaba. Por su parte, la mezzo soprano Luretta Bybbe que encarnó a la señora Nellie Lovett, la cómplice de Sweeney, tuvo una participación clave en el desarrollo de la obra, no sólo por el papel que le tocó representar, sino por la facilidad con que hacía que el público reventara en risas y aplausos. Así, los tenores Pascal Charbonneau -Tobias Ragg- y David Curry -Adolfo Pirelli-, tuvieron aportaciones que sin lugar a dudas hay que destacar. Sus papeles –aunque secundarios- le dieron el toque de humor perfecto al musical.
Sweeney Todd: el barbero diabólico de la calle Fleet, es una obra que todos deberíamos ver pues hace posible la reflexión acerca de la humanidad y su posible futuro (o tal vez presente): el hombre que devora al hombre.